El tabaco. Un salto en la historia

Share on facebook
Share on google
Share on twitter
Compartir en

La historia de los cigarrillos mentolados no puede no entrelazarse con la del tabaco. Orígenes antiquísimos que van hasta el descubrimiento del Nuevo Mundo, América, rico en recursos como las plantas de tabaco.

La planta permaneció para uso exclusivo de los pueblos de las Américas hasta la llegada de Cristóbal Colón. Cuando el navegante llegó a las Bahamas, los indígenas le dieron hojas de tabaco seco. Colón llevó estas hojas secas a España.

En el siglo XVI España se convirtió en el principal importador de tabaco de las Américas y declaró la ciudad de Sevilla como capital del tabaco en el mundo.

En este período era cultivado por los monjes cistercienses en los campos romanos por las propiedades que les fueron reconocidas por los indios de América ante todo, que lo utilizaban para aliviar la sensación de hambre y de cansancio.

Se hizo popular en el Vaticano, masticado o fumado en cualquier ocasión, también en la iglesia. Estos excesos hicieron que en 1624 el papa Urbano VIII prohibiese el tabaco en San Pedro. No se condenaba el uso del tabaco en sí, era su exceso el que se consideraba un vicio.

Llegamos a la historia más reciente.

Durante la Primera Guerra Mundial, en Europa, la demanda de tabaco (también de cigarrillos mentolados) aumentó exponencialmente.

Los gobiernos nacionales europeos distribuían cigarrillos gratis al ejército en las trincheras. Al terminar la guerra, de vuelta a su patria y aclamados como héroes, los soldados siguieron fumando, popularizando así esta costumbre. El escenario no cambió durante y después de la Segunda Guerra Mundial. De hecho, los cigarrillos se incluían en las raciones de los soldados americanos que siguieron fumando el mismo producto también al terminar la guerra.

cigarrillos mentolados

El nacimiento de los cigarrillos mentolados

Al inicio de los años 20, precisamente en 1924, nacieron los primeros cigarrillos mentolados, inventados por casualidad por Lloyd «Spud» Hughes en Ohio, después de haber guardado unos cigarrillos en un tarro que contenía menta piperita. Solo después se dio cuenta de que el tabaco había absorbido el aroma. El descubrimiento no tuvo mucha relevancia hasta que la Axton-Fisher Tobacco Company compró la patente en 1927 y los comercializó con el nombre de Spud Menthol Cooled Cigarette.

Fueron los únicos y los más populares cigarrillos aromatizados mentolados de Estados Unidos hasta 1937, ya que el año siguiente, la Brown & Williamson Tobacco Company creó la marca Kool por sus cigarrillos mentolados.

El marketing ha contribuido a hacer famoso este producto, fuerte en el mercado americano durante dos décadas, disfrutando de las características del mentol. Los cigarrillos Kool se hicieron famosos por ser un «confort para la garganta» o propuestos como uso ocasional, de forma alternativa a otros tipos de tabaco.

En 1956 Kool deja el sitio a Salem, la nueva marca de cigarrillos mentolados de RJ Reynolds Tobacco Company, los primeros en tener filtro en el extremo.

Visto el éxito de Salem, el mercado empezó a llenarse de cigarrillos mentolados con filtro:

  • Lorillard con Newport en 1957;
  • Philip Morris con Alpine en 1959;
  • Brown & Williamson con Belair en 1960.
  • BAT con Vogue en 1987.

El Marketing en los cigarillos aromatizados

En los años 20, cuando los cigarrillos aromatizados con mentol eran una novedad, se posicionaban en el mercado como un producto con un sabor más suave respecto al tabaco normal, para dirigirse indirectamente al público femenino.

Algunos anuncios utilizaban como testigos a actrices conocidas y definían los cigarrillos mentolados como una alternativa a los dulces, para mantener la línea. O se centraban en el factor étnico, con mensajes dirigidos a los afroamericanos que, en los años 70, preferían los cigarrillos mentolados. En otros, los cigarrillos mentolados se definían con «riesgo modificado», es decir, falsamente menos dañinos que los cigarrillos tradicionales.

YellowAmarillo. El color de la creatividad.

YellowAmarillo es el primer blog monográfico firmado por QuestionMark con un color como nombre. Un color que se vuelve Yellow en la lengua universal de la comunicación, y Amarillo en la de nuestra segunda casa, España. ¿Por qué amarillo? Porque es el color de la luz, del descubrimiento, de la creatividad. Para nosotros el único posible.

QuestionMark